Iñaki Urdangarin ha estado en innumerables ocasiones en Baqueira, en el chalet de uso exclusivo de la familia real que siguen frecuentando las infantas Elena y Cristina y Victoria Federica. /
En un nuevo giro de guion que nadie pudo prever, Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia vuelven a las portadas gracias a su conexión con la familia real. La sorpresa con su celebración de San Valentín es total y general. Orquestaron un viaje a la nieve de Baqueira Beret y se alojaron en el mismo chalet que la familia real usa en exclusiva desde 1984. En la lujosa casa a pie de pista que compartió con la infanta Cristina .
Obviamente, esta concesión a Iñaki Urdangarin (55 años) y su nueva pareja sentimental no estaba en las quinielas de nadie, y no tanto por la presencia de Ainhoa Armentia (44) como por las polémicas circunstancias de la separación de los ex duques de Palma. Recordemos que la ruptura no tuvo preparación ni prolegómenos, sino que se desató bruscamente tras la publicación de unas fotos robadas. Fue una humillación para Cristina de Borbón .
Poco se sabe de este viaje relámpago de Ainhoa Armentia e Iñaki Urdangarin al Valle de Arán (Lérida), más allá de su estancia en La Pleta, la urbanización de lujo que tantas veces ha acogido a distintos miembros de la familia real. Se trata de una vivienda de más de 200 metros cuadrados y reformada en 2010 que no ha contado con el favor de los reyes Felipe VI y Letizia , aficionados a pagar de su bolsillo pistas suizas o canadienses.
Los actuales reyes prefiere no hacer uso de privilegios heredados ni recientes, por lo que es comprensible que ya no ocupen esta propiedad cedida a la familia real. Sin embargo, la infanta Elena y la infanta Cristina sí se han alojado en ella en distintas ocasiones durante los últimos años. Jamás, eso sí, habían pernoctado en ella personas ajenas a la familia del rey.
La familia real comenzó a alojarse en uno de los chalets de lujo de la urbanización La Pleta, en la estación de esquí de Baqueira Beret y a 700 metros de sus pistas, en 1984. /
La presencia de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia ha provocado un terremoto, aunque lo cierto es que el ex duque de Palma no sale oficialmente de la familia del rey hasta que no se firme el divorcio de la infanta Cristina, previsiblemente en junio. Parece que, hasta entonces, el ex deportista sigue contando como yerno y cuñado de reyes y con acceso a este tipo de privilegios. Asombra, eso sí, que incluya a Ainhoa Armentia.
Parece que los enamorados Urdangarin y Armentia no esquiaron, ya que ella no domina el arte de los esquíes, pero sí dieron románticos paseos por la nieve y disfrutaron de las vistas de la estación leridana. Obviamente, no estamos ante una estancia que suceda a espaldas de Casa Real. En ningún momento la propia estación (la empresa que la explota) obró por libre para autorizar la estancia del ex duque de Palma y su nueva novia. Todo estaba atado y bien atado.
Por raro que pueda parecer, hay informaciónes que aseguran que Casa Real dio permiso a Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia para alojarse en la urbanización La Pleta y en la casa que usa en exclusiva la familia real. Es la revista Hola la que ha confirmado que el ex duque de Palma pidió permiso y se le concedió. Sin embargo, la periodista Mariángel Alcázar ha contado que la pareja llegó por sorpresa a Baqueira Beret y se fue 16 horas después precisamente porque Casa Real o alguien próximo afeó la maniobra.
Este atrevimiento de Iñaki Urdangarin pone sobre la mesa el misterioso acuerdo que puede tener con la infanta Cristina y que explica por qué el divorcio no es ya efectivo. Para los cronistas de casa real, su estilo de vida vacacional solo se explica si existe una economía en común con la hermana del rey Felipe VI. Parece que, desde hace unos meses, ya no conduce un utilitario, sino con coche de lujo que no se corresponde con sus ingresos.
Algunos de los chalets de lujo de la urbanización La Pleta, en la estación de esquí de Baqueira Beret. /
Además, y pese a informaciones publicadas, los paparazzi que siguen a Iñaki Urdangarin desvelan que continúa haciendo uso de escoltas. Para algunos cronistas, sus apariciones vacacionales con Ainhoa Armentia son una provocación destinada a molestar a la familia del rey. Para otros, por algún motivo desconocido continúa disfrutando de prebendas y privilegios propios de un cuñado del rey Felipe VI.
Si es cierta la implicación de Casa Real en esta pernocta de Urdangarin y Armentia en Baqueira, esta decisión abre nuevos frentes al respecto de la actitud de Zarzuela con el ex duque de Palma. Sobre todo, por agravio comparativo con Jaime de Marichalar, un señor que tras su divorcio de la infanta Elena desapareció absolutamente del horizonte de los Borbón. ¿Por qué este trato de favor al ex deportista? ¿Qué impide el borrado, omisión o invisibilización que sufrió el ex duque de Lugo?