Basilea, Suiza /
Todos los años por estas fechas se celebra el evento que une a familias y amigos frente a la televisión. El festival de Eurovisión lleva décadas consagrándose como el concurso de música más popular en el que cada país se vuelca con su representante y lo da todo, ya sea en la comodidad del hogar o viajando hasta el lugar donde se celebra el festival cada año.
La ciudad que acoje Eurovisión 2025 es Basilea, capital de Suiza y frontera entre este país, Francia y Alemania. Más allá de ser el centro del festival, Basilea destaca por su encanto medieval de lo más pintoresco que ha conseguido encajar a la perfección con un carácter cosmopolita y vanguardista de referencia.
La historia de Basilea se remonta a la época de los romanos, momento que marcó su personalidad al confluir en ella la cultura latina con la germánica. De la Edad Media conserva una herencia arquitectónica que marca la estética de buena parte de la ciudad, pero, sin duda, su época de máximo esplendor fue en el S.XV. En este momento se convirtió en la sede del humanismo europeo y hogar durante una temporada de Erasmo de Róterdam.
Tanto si te consideras «eurofan» y vas a viajar hasta Suiza para apoyar a Melody como si estás preparando una escapada para el próximo verano y te apetece conocer destinos interesantes y bonitos, Basilea se presenta como un auténtico t esoro que merece la pena descubrir. Calle que parecen sacadas de un cuento, rincones que conquistan los corazones de todo amante del arte y la gastronimía soñada para los más golosos, esto es lo que no te puedes perder si Basilea está entre tus próximos planes viajeros.
Basilea, Suiza /
Uno de los grandes atractivos de Basilea es su casco antiguo, donde conviven toda la herencia artística y cultural que han dejado todas las civilizaciones que han pasado por ella con la innovación y las nuevas construcciones modernas. Este lugar es perfecto para pasear no solo por todo lo que puedes descubrir en él, también por la calma que se respira en sus calles, muchas de ellas con la estética con la que te imaginas los cuentos de princesas de tu infancia.
En su casco antiguo se ubica uno de los edifcios más particulares de Basilea, el Ayuntamiento. Ubicado en la Marktplatz, est edificio destaca por su fachada roja y sus frescos de lo más llamativos. Actualmente es la sede del es la sede del Gobierno de Basilea y del Parlamento, pero más allá de su labor administrativa, merece la pena visitarlo por dentro y descubrir espacios como su patio interior, las salas del consejo o la espectacular torre.
Detalle del Ayuntamiento de Basilea, Suiza /
Otro de los edificios emblemáticos de este casco antiguo es la Catedral de Basilea, conocida como el Basler Münster. Fue construida entre los siglos XI y XV, por lo que el románico y el gótico son los estilos artísticos que predominan en ella, que junto con el característico tono de la arenista roja hacen de esta cosntrucción una de las más curiosas y bellas de la ciudad. Pero no solo destaca por ella misma, también por las vistas que ofrece desde la parte posterior en la que se pueden apreciar barrios icónicos de la ciudad y el río Rin.
Porque si hay una cosa que caracteriza Basilea, esa es la importancia que el Rin tiene en su vida y en su concepción artística y arquitectónica. El río divide Basilea en Grossbasel (la ciudad antigua) y Kleinbasel (la zona más moderna), pero lejos de ser un elemento de separación, el río actúa como nexo de unión entre ambas zonas, lo que da como resultado una ciudad cohesionada de gran riqueza cultural.
La importancia del río es tal que incluso se han llegado a construir edificios con la intención de generar un diálogo entre el agua y la arquitectura. Es el caso del edificio de la Fundación Beyeler, que aunque no está en el centro exacto de la ciudad, es el mejor ejemplo de como el agua es requisito indispensable en la concepción de la obra.
Vistas de Basilea y el río Rin /
Una de las mejores formas de conocer Basilea es seguir el cauce del Rin y dejarse llevar por el ritmo que el río marca. Si paseas por su orilla podrás disfrutar de vistas espectaculares como las que ofrece el Mittlere Brücke, el puente más antiguo de la ciudad y apreciar desde este paseo la esencia de la vida local. Pero también puedes adentrarte de forma más literal en el río en un paseo en balsa sin motor, una tradición ancestral que aún se conserva en la ciudad.
Junto al río Rin, otro de los elementos que conforman la identidad de Basilea son los museos. Basilea es considerada la capital de la cultura suiza y sus más de 40 museos así lo demuestran, y es que esta ciudad vive el arte de forma muy personal y con un gran respeto hacia el patrimonio. Uno de los museos más importantes de Basilea es el Kunstmuseum Basel, donde se conservan obras de Van Gogh, Picasso o Monet, entre otros.
Los amantes del arte contemporáneo visitarán la Fundación Beyeler no solo por su arquitectura, también por el arte que se exhibe en su interior. Warhol, Miró o Bacon son algunos de los artistas cuyas obras se pueden visitar en este especial museo que bien merece una parada en tu viaje a Basilea. Un ejemplo más de que, más allá de Eurovisión, en Basilea el ambiente de fascinación por arte y la cultura en todas sus expresiones está presente en sus calles los 365 días del año.