La tierna despedida entre la reina Letizia y la princesa Leonor, el pasado mes de enero en Cádiz. /
Han pasado ya cuatro meses desde que la princesa Leonor embarcara en Cádiz en el buque escuela Juan Sebastián Elcano, un viaje en el que la Armada termina de poner a punto a los que pronto se convertirán en oficiales. Se trata del último reto de la heredera antes de comenzar la última fase de su instrucción militar, en la Academia de San Javier del Ejército del Aire. Puede que sea el periodo más largo de separación de sus padres, los Reyes. Sobre todo de su madre, la reina Letizia .
No descubrimos la pólvora si ponemos el foco en la cómplice relación que mantienen la reina Letizia y su hija mayor, la princesa Leonor. Todo el mundo pudo constatarla en las dos despedidas clave que protagonizaron madre e hija. No aquella escenificación en el aeropuerto de Madrid, cuando la joven partía para el internado de Gales UWC Atlantic College, sino su ingreso en la Academia General Militar de Zaragoza, en agosto de 2023, y la citada despedida en Cádiz.
Los abrazos entre madre e hija fueron muy significativos, pero también hubo palabras que subrayaron la trascendencia de aquel momento. La reina Letizia no pudo esconder su emoción al despedirse de Leonor , hasta el punto de enjugarse algunas lágrimas. Más tarde, confesó a los periodistas: «Aquí hay muchas madres como yo, son muchos meses sin verla».
El viaje que ha llevado a la reina Letizia de Madrid a Panamá, un vuelo de alrededor de 13 horas para recorrer 8.000 kilómetros y ver a su hija Leonor , no parece ser un requerimiento especial de la familia real, pues en esta escala del Juan Sebastián Elcano acudirán otros familiares o amigos directos a visitar a los guardamarinas. La presencia de la Reina, en todo caso, es estrictamente privada y no participará en la agenda oficial de la escala panameña.
Si los cálculos no fallan, la reina Letizia viajó el viernes hacia la capital panameña y permanecerá en Ciudad de Panamá desde el sábado hasta el próximo día 6, cuando el buque escuela Juan Sebastián Elcano parte con destino Cartagena de Indias y Santa Marta, en Colombia. Parece que madre e hija han buscado aprovechar al máximo cada minuto de esta escala, con lo que parece probable que pernocten juntas en algún hotel.
Panamá es una de las últimas escalas de la ruta confeccionada por los mandos de la Escuela Naval de Marín para instruir a sus jóvenes guardamarinas, incluida la princesa Leonor. Tras pasar por Colombia, el buque escuela Juan Sebastián Elcano partirá hacia Santo Domingo, en república Dominicana, y desde allí arribará a Nueva York. Será el 5 de junio y marcará el final del viaje de la heredera, quien desembarcará para seguir su formación naval en una fragata.
Una emocionada reina Letizia se funde en un abrazo con su hija, la princesa Leonor, tras cuatro meses sin verla. Se han reencontrado a bordo del Juan Sebastián Elcano en Panamá, adonde ha viajado la reina. /
Volviendo a la reina Letizia, cabe apuntar la liviandad de su agenda oficial de las últimas semanas, en las que la hemos visto mucho menos presente en actos oficiales que de costumbre. Las circunstancias han echado al traste algunas esperadas apariciones de la familia real, como la que suelen realizar en la Semana Santa, acudiendo con sus hijas a alguna procesión. Las fuertes lluvias aconsejaron que, este año, los Reyes y la infanta Sofía se quedaran en Zarzuela.
La cercanía de las vacaciones de Semana Santa y el largo puente que abre mayo en la Comunidad de Madrid también le ha dado un tiempo extra a la reina Letizia, aunque el evento decisivo fue el apagón que sufrió nuestro país el pasado 29 de abril. Debido a este fallo del sistema eléctrico, Zarzuela anuló la agenda real de la semana. Así las cosas, de su último compromiso oficial, el funeral del papa Francisco en el Vaticano, a su próxima cita, la visita a la Feria del Libro Permanente de la Cuesta de Moyano de Madrid el próximo 9 de mayo, pasarán 13 días.
Paradójicamente, durante el mes de abril hemos contemplado a la reina Letizia en actividades que suelen quedar fuera del ojo público, pues pertenecen a su agenda privada. La fotografiaron a principios de mes en el barrio madrileño de Tetuán, donde acude a un centro de estética natural. A finales, sin embargo, la pillaron ojeando libros en una conocida franquicia de la capital. Se fue sin llevarse nada, no sin antes avisar a su equipo de seguridad para que la recogiera en la puerta.