Blanca Martínez, en el centro, da el do de pecho en Mariliendre. /
Estamos de nuevo ante una producción de Javier Calvo y Javier Ambrossi , los famosos Javis. Que tiemblen los cánones. Porque es igual de deslenguada, desprejuiciada, intensa y excesiva que todo lo que tocan. Tan cutre como real, tan «petarda» como emotiva, y muy profunda en lo superficial. La serie Mariliendre, creada y dirigida por otro Javi, Ferreiro, se estrena hoy 27 de abril en Atresplayer y apunta maneras. Es irreverente como la que más y viene con liturgia dominical. Una entrega por domingo y hasta llegar a seis. Si no fuera porque en el fondo late el drama, sería una comedia, divina y predicando hasta en el desierto la diversidad.
Un musical a toda pastilla que invita al personal al amor y la locura al grito de «¿Qué sería de los maricones sin las mariliendres?». La respuesta es: «Nada». Mientras, se bailan unos cuantos hits dosmileros, viniendo a cuento y como si no hubiera un mañana. Del estilo de Cuando tú vas, de Chenoa ; Toma vitamina, de La Fiesta; o Amén, de Azúcar Moreno. Sin que falten Mónica Naranjo, OBK o Fangoria, dejando claro que la juerga no solo sirve para desvariar, sino también para desahogarse, redimirse y recomponerse. Con orgullo y con amigos.
Para cuando la música suene a todo trapo, ya estás dentro de ese universo sin paredes que es la serie. Una fantasía barroca muy pop y queer, dividida en seis capítulos, que va a desatar pasiones y fervor, en especial entre los fieles parroquianos, los adictos a Paquita Salas, La Mesías y demás. Ferreiro ya colaboró con Los Javis en Vestidas de azul (2024), secuela de Veneno (2020). Ahora, Mariliendre lleva toda su esencia heterodoxa concentrada en el título.
Una mariliendre, por cierto, es la mujer que frecuenta la amistad de hombres homosexuales, según la RAE. Término tachado de despectivo y coloquial, en cuanto a su uso, y que los responsables de la serie se han llevado a su terreno, dándole la vuelta a la tortilla. ¿Coloquial? Encaja a la perfección. ¿Despectivo? Todo lo contrario. Aquí lo que pasa es que Mariliendre, encarnada por Blanca Martínez (Todas las veces que nos enamoramos), va con mayúscula a todos los efectos porque honra a la protagonista de esta composición que es casi una heroida en pleno barrio de Chueca.
La Mariliendre de España y amigos en un momento de la serie. /
La serie cuenta la historia de Meri Román, que fue una reinona de la noche gay capitalina hace diez años, siempre rodeada de su corte de amigos LGTBIQ+, con Jere (Martin Urrutia) a la cabeza. En sus palabras: «Yo era la Mariliendre de España, un imán para todos los maricones». Solo que ahora es una heroína caída en el olvido que está de vuelta en su Ítaca y viviendo, con sus 35 a cuestas, su particular calvario, la muerte de su padre (Mariano Peña). Ahí arranca todo, con un secreto y un funeral.
Ella misma lo dice: «Mi vida de Mariliendre se acabó de un día para otro». Pero la soledad fría y desangelada del tanatorio la va a llevar a rememorar el calor de sus noches de discoteca. Y por aquí se deslizará el guion. Las lágrimas se irán entreverando entre canciones y personajes del ayer, levántandole el ánimo y acompañándola en su dolor hasta llegar a hacer efervescente el duelo.
Blanca Martínez se mete en la piel de la efervescente Meri Román en Mariliendre. /
Los grandes éxitos Que el ritmo no pare, Te quiero más o Yo quiero bailar, a modo de elegía popera, conseguirán que Meri sienta «la llamada» y quiera reconectar con su séquito de amigos del colectivo, a la par que llenar de sentido su deslavazada vida y apuntalar su identidad. La serie ha contado con Paloma Rando y Carmen Aumedes como guionistas, hilando fino para desterrar estereotipos tanto dentro como fuera, y con Pablo Lluch y Vic Mirallas como directores musicales, orquestando y puliendo la función.
Al fin y al cabo, Mariliendre bebe de West Side Story, Mamma mia! o La La Land, pero también, y a tragos, de Operación Triunfo . Para empezar, Lluch y Mirallas oficiaron de profesores en el reality. Nina, la exdirectora de OT, es aquí madre de la estrella. En el elenco está el ya nombrado Urrutia, triunfito que debuta como actor; Soraya Arnelas y la propia Chenoa tienen sus cameos correspondientes, y hay temas de otros concursantes incluidos en la banda sonora. Para colmo, Bea Fernández (OT 2023) es la voz de Blanca Martínez, que baila estupendamente pero no canta.
A Los Javis, al frente de la productora Suma Content, les gusta romper moldes y ahora también lo han hecho. El reparto es igual de diverso y heterodoxo que lo demás. Con actores que no habían cantado nunca antes y viceversa, cantantes que no habían pisado unas tablas jamás. En la serie canta hasta el apuntador.
Blanca Martínez junto a Martin Urrutia, un triunfito en el universo de Los Javis. /
Por Mariliendre desfilan además Omar Ayuso, Carlos González y Yenesi, que hacen de Luis, Saúl y Leo, los amigos con los que Meri quemaba la noche madrileña. También se lucen Álvaro Jurado, Jorge Silvestre, Mariona Terés, Jorge Calvo, Jazz Vilá, Juanba Cucarella, Piti Alonso, Jorge Roelas y Pepón Nieto.
Antes de este domingo de ascensión a los cielos del audiovisual, Mariliendre ya tuvo su momento de gloria al clausurar el Festival de Cine de Málaga el pasado marzo, cosa novedosa al tratarse de una serie, y también al mostrar sus dos primeros episodios en un pase previo de cine hace solo unos días. Había que abrir boca e ir convocando a los fieles. A nadie se le escapa hoy por hoy que lo del público con Los Javis y alrededores, en particular millennials y centennials, es devoción.